28/05/2019. Madrid. Las Ventas. Decimoquinta de abono, tres cuartos de entrada.
Toros de JOSÉ ESCOLAR. Bien presentados, en tipo, Muy exigentes.
FERNANDO ROBLEÑO . Seis pinchazos y tres descabellos. Un aviso. Silencio. Estocada caída y descabello. Un aviso. Vuelta.
GÓMEZ DEL PILAR. Pinchazo y media estocada caída. Un aviso. Saludos. Pinchazo, pinchazo hondo y descabello. Un aviso. Saludos.
ÁNGEL SÁNCHEZ. Estocada corta. Saludos. Estocada corta caída. Un aviso Palmas.
Primera del ciclo Albaserrada que puso a cada cual en su sitio. Una tarde que añadió la gracia de Eolo para darle máxima tensión a lo ocurrido. La exigencia de los Escolar, puso en jaque a la terna, que necesitaron mucha firmeza y temple para salir airosos del trago. Matadores y los de plata trabajaron de lo lindo. No se aburrió nadie.
Una terna de madrileños de los que vienen de matar lo que las figuras no quieren ni ver, se reunieron ayer en Las Ventas para dar cuenta de un encierro para buenos aficionados. Se mascó la tensión desde el minuto uno hasta el arrastre del sexto y gracias a Dios no hubo percance.
La experiencia de Robleño se vio desde el principio cambiando los terrenos habituales acercándolos a la querencias y así evitar de alguna forma las rachas de viento y buscar ayuda para corregir los atisbos de esa mansedumbre encastada que tubo alguno y al final toda la corrida se desarrolló por esas zonas.
En ningún momento hubo tregua, las frivolidades para otro día, cien ojos y los cinco sentidos, valor y firmeza fueron necesarios para vencer.
Robleño, inédito en el que abrió plaza. Vio en el cuarto, tras el trasteo, que adelantando la muleta y templando se podía ligar y poco a poco tirando de oficio, completó dos series de derechazos que calaron.
Del Pilar, afrontó el reto con firmeza, dos portagayolas para dejar claro a lo que venía, Intentó el toreo citando de largo y sobre todo con la derecha y por momentos consiguió la ligazón. El quinto que se metía y rebañaba, a pesar del intento de torear, todo quedó en eso.
Sánchez en el tercero no encontró el acople en un toro que tenía buena condición, a pesar de la paliza de Leiro y el madrileño se diluyó entre el viento y la embestida de su oponente. En el sexto Sanchez volvió a las andadas y el viento también y todo quedó en intentos.
Nota alta para los tres matadores que resolvieron una tarde de máxima dificultad, por el viento racheado.