Por Carlos Bueno martes, 10 de diciembre de 201907:35
Tras 10 años como director de Greenpeace España, Juan Antonio López de Uralde Garmendia, Juantxo López, fundó Equo en 2010, el primer partido verde de ámbito estatal. Equo pronto se alió con Unidas Podemos hasta que, el pasado mes de septiembre, la formación ecologista se sumergió en una gran crisis provocada por las diferencias estratégicas de sus dirigentes. Mientras unos apostaban por mantener la alianza con Pablo Iglesias, otros preferían romper y embarcarse en el proyecto de Íñigo Errejón. Y en esa disyuntiva Juantxo permaneció fiel al bando morado aunque sus excompañeros decidían -mediante consulta interna- apoyar el nuevo programa de Más País.
El pasado mes de noviembre, se pudo ver a López de Ugalde en el acto de firma del preacuerdo de Gobierno, escoltando a Pablo Iglesias y estrechando la mano de Pedro Sánchez, y ya hay quien le sitúa como próximo ministro de Transición Ecológica. Juantxo es el principal impulsor del punto tres del decálogo firmado por los comunistas y los socialistas, en el que se incluye “la garantía de un trato digno a los animales”. Teniendo en cuenta que el diputado donostiarra ha dicho abiertamente y en reiteradas ocasiones que quiere terminar con la caza y la pesca, su entrada en el Gobierno podría suponer la toma de decisiones más desafortunada para los animales y su hábitat. De hecho, criticó con dureza el compromiso del PSOE andaluz de favorecer la caza sostenible y social por tratarse de una actividad que juega un papel económico y ambiental esencial en el mundo rural.
Además, la semana pasada Unidas Podemos, a través del mismo Juantxo López, volvió a arremeter contra la tauromaquia en el programa La Noche en 24 horas de Televisión Española. El ecologista afirmó que no le parece adecuado que en el siglo XXI la Fiesta Nacional de un país sea una ceremonia en la que se sacrifica un animal de forma sangrienta. El sectario político, del mismo modo que desoye las conclusiones de técnicos, científicos, biólogos, ingenieros, ambientólogos y escritores de los mejores libros sobre especies animales que defienden la necesidad de la caza aún cuando ellos no son cazadores, ahora desestima la vida de medio millón de animales bravos que existen gracias a la tauromaquia y omite los informes que constatan el tesoro medioambiental que significan las dehesas dedicadas a la cría del toro.
Más que un verdadero idealista preocupado por el medio ambiente, el hábil Juantxo, que ha pasado de ser miembro de una ONG a candidato a ministro en tiempo récord, parece un auténtico autoritario intolerante que pretende imponer su doctrina sin tener en cuenta los argumentos y las libertades de quienes no piensan como él. Sus declaraciones en televisión dejan intuir la intención de prohibir aquello que no le parezca adecuado. Hace sólo cuatro años, después de obtener unos buenos resultados electorales, López de Uralde atribuyó el éxito a su apuesta por “el derecho de los españoles a decidir”, algo que ahora parece haber olvidado adjudicándose a sí mismo el derecho a decidir por todos los españoles, que suena parecido pero es radicalmente distinto. Cuidado con los dictadores, que haberlos haylos, y no todos están enterrados.