11/07/2019 Madrid Las Ventas. 2ª del ciclo de nocturnas. Asistentes 7.306 espectadores.
Novillos de FERNANDO PEÑA. Desiguales, mansos de diverso juego, se salvó el 5º que puso calidad y bravura.
EL CHORLO. Pinchazo y estocada. Saludos. Pinchazo y estocada trasera. Saludos.
ANTONIO GRANDE. Estocada caída. Saludos. Cuatro pinchazos. Un aviso. Pitos.
BORJA XIMELIS. Pinchazo hondo y dos descabellos. Un aviso. Palmas. Estocada. Palmas.
Mucha mezcla en el hierro toledano, aunque predomine la hegemonía bodeguera y sus consecuencias. Predominó la mansedumbre y la flojera, tan solo TEATRERO lidiado en 5º lugar, puso nota alta. Embistió con fijeza de salida, derribó en la primera vara y empujó con clase y fuerza en la segunda , descolgó en la muleta y repitió con codicia, un novillo para desorejar.
Según la RAE, Chorlo, es un Silicato de Alúmina que se encuentra en rocas graníticas. Me picó la curiosidad e investigué y he ahí que a pesar de mis conocimientos de Geología fui ignorante de la afección del mote, cuando la tenía a mi alcance en infinidad de libros y tratados.
Una terna de novilleros diversa entre sí y calcada de ocasiones anteriores. Solo destacar la disposición de rocoso Chorlo que intento agradar, a portagayola y con un toreo desigual, del que se pudo salvar algún muletazo suelto, un toreo hacia afuera y en su mayor parte de carrusel, anduvo presto con los aceros y saludó en los dos novillos.
El salmantino Grande, se estrelló con BOMBILLA, un novillo que exigía por el pitón izquierdo y el novillero no supo resolver. El que hizo quinto, TEATRERO, salto a la arena distinto a sus hermanos, atendía las llamadas y Grande tuvo que parar una embestida violenta y reiterada. Derribó en el primer encuentro con el jaco y empujó con clase en el segundo y llegó a la muleta humillando y repitiendo, para dejar tanta calidad en un toreo absurdo y simple al que nos tienen acostumbrados la mayoría de los novilleros que pasan por Madrid.
De Borja no soy capaz de destacar algo bueno. Banderilleó sus dos novillos tipo Fandila, a toro pasado y en alguna ocasión tomó el olivo. Con la muleta, nada nuevo, citando en la oreja, dar vueltas y prescindir de las distancias.
Tremenda voltereta la que recibió Jarocho, afortunadamente sin consecuencias mayores.