OPINIÓN – Artículo sobre la marcha de Joselito de la Escuela de El Batán
por C.R.V. 19/12/2019 en Actualidad.
En una carta extensa y dura, en una combinación de golpes dispuestos para el KO, elegante y precisa, y posiblemente sincera, Jose Miguel Arroyo, Joselito, anuncia un paso atrás en su quehacer en El Batán. Se me escapan detalles e historias para afrontar un juicio de valor, con el añadido de que me da cierta pereza y, además, mi opinión es intranscendente y, al final, inverosímil. Asisto, no perplejo sino con tristeza notarial, al mendeliano y hasta darwinista quehacer español: el cainismo.
Me aterra esta insistencia de pelear a garrote con el fraterno, con el hermano. Un algo español a más no poder como certifica esta actualidad de convivencia progresista y talentosa de nuestros políticos en nómina, que, el toreo, como ya dijo Ortega y Gasset, ejemplifica en su micromundo: dime cómo anda el toreo y te diré cómo anda el país. Y en el toreo, en un casi histórico, hay tanto de grandeza como de miseria. Resulta que, según la precisa carta de Joselito, había, hubo o hay dos “bandos” de la misma raza, sangre, ideales, de la misma nación y hasta de la misma generación, reeditando de forma leal y letal eso de Caín mató a Abel.
En el toreo hay, insisto, tanta grandeza como miseria. Por eso somos quienes somos, no sé si para bien, para mal o para mitad y mitad.
En el toreo hay, insisto, tanta grandeza como miseria. Por eso somos quienes somos, no sé si para bien, para mal o para mitad y mitad. La historia, la nuestra, nos dice que cuando Curro Cúchares movía la infantil muleta antes de meter la espada, “hacía títeres”. El toreo es hoy, entre tantas definiciones, El Arte de Cúchares. Belmonte era un contrahecho incapaz e imposible. Gallito era un señorito manipulador de ganaderías. Manolete, un perfilero. El Cordobés, un batracio. Todo lo que fue novedoso fue perverso, reo de hoguera inquisitorial. Lo bueno del toreo es que no aplicamos el revisionismo, porque, de hacerlo, deberíamos dedicar mucho tiempo a pedir perdón por tanta inquina, insidia, estupidez y… cainismo.
Hay mucho en lo escrito de Joselito que suscribo. Cada vez que alguien reflexiona sobre el futuro de la Tauromaquia pensando en los cambios sociales, el cainismo aflora para decir que el mejor cambio para el futuro es el pasado. Incluso sin decir nada, tan sólo poniendo un “buenos días” en Twitter, sabemos que el Caín de turno responderá contra ese saludo como si uno fuera el que mató a Manolete.
Y es curioso que en medio de este cainismo de “escuelas”, estrecho, triste, lamentable, feo…, salen ilesos tipos como el anterior Director del Centro de Asuntos Taurinos y el Consejero, capaces de ponerse medallas en el pecho de tal forma que le faltaba pecho para tanto metal, afirmando que habían salvado la Escuela tras la expulsión de El Batán, cuando quien la salvaba era el dinero de la empresa de Madrid. El de público de toros. Del abonado.
El dinero de Madrid y de sus escuelas y de todo lo que hay, pertenece al torero, a sus miedo, sangres, éxitos y trabajos, traducido en moneda por el aficionado.
De esas medallas, como de tantas que se auto imponen los que “ayudan al toreo” con un puñado de euros, ninguna es suya. El dinero de Madrid y de sus escuelas y de todo lo que hay, pertenece al torero, a sus miedo, sangres, éxitos y trabajos, traducido en moneda por el aficionado. Mientras Caín mata a Abel, se nos vende la burra coja de que se nos “ayuda” con un puñado de euros que previamente, hemos puesto nosotros de nuestro bolsillo. Y nadie dice nada porque el cainismo es un espectáculo atractivo y de mayor gozo que plantar cara a la verdad y a quien osa vender la burra.
Y es este cainismo inhóspito y feo el que permite que los pechos que no tienen derecho a un mísero alfiler de una medalla, estén llenos de ellas de cara a al aficionado.
Me faltan información y me da pereza un nuevo remake de Caín y Abel. Me basta con regresar a esa tristeza de gente tan grande actuando de forma tan estrecha. Me gusta el gesto de hacerse a un lado de Joselito. Un tipo silencioso, por cierto. Hoy puedo contar algo sucedido hace años, cuando Vía Digital televisaba (pagando mucho más dinero que el actual) las ferias. En una de Sevilla Joselito fue anunciado sin haber firmado que la corrida sería televisada. La mañana del festejo, su apoderado, Martín Arranz, dijo: el toreo torea sin televisión, tal y como está firmado el contrato. No dijo que no toreaba, no. Dijo que toreaba y sin tele y que, de no ser así, demandaba a todo dios. Y no se televisó.
Cuando Vía Digital televisaba (pagando mucho más dinero que el actual) las ferias, en una de Sevilla Joselito fue anunciado sin haber firmado que la corrida sería televisada. La mañana del festejo, su apoderado, Martín Arranz, dijo: el toreo torea sin televisión, tal y como está firmado el contrato.
Y, además, los periodistas que hacíamos nuestro trabajo entonces, entendimos que le asistía toda la razón en justicia. Nadie se esperaba que un toreo tomara esa decisión. Joselito, si. Hoy es distinto. No hay un solo torero capaz de hacer eso. Al contrario, una y otra vez se le repiten sus éxitos, sus petardos, sus tardes de nada y sus tardes de cornada, que, además, rima. Y escribo todo esto, a sabiendas que quedo expuesto al pagano ritual hispánico del cainismo.
Pero, por si acaso y sin que sirva de nada: cada vez que veo y miro el cuadro de Goya (Duelo a garrotazos) no tomo partido. No se quienes son, quien pisó a quien, Sólo siento una profunda tristeza por tanto derroche de valor, fuerza y energía contra el hermano. Y, siendo sinceros, intuyo quienes andan a garrotazos aquí, uso el recuerdo, y la tristeza es mayor. Espero y tengo fe en que Abellán, nuevo en su cargo, vaya tratando de que los garrotes den paso a las manos apretadas de los hombres.
José Miguel Arroyo Joselito deja la Escuela Taurina de la Venta de El Batán. El torero madrileño ha justificado su decisión en un comunicado remitido a los medios ‘para que los alumnos de la Escuela José Cubero “Yiyo” ocupen nuevamente las instalaciones de donde no deberían haber salido’. Joselito ha añadido que ‘No dejo la Escuela por cansancio, ni por frustración, ni me escondo en glorias pasadas, sino creyendo más que nunca en la necesidad de un cambio’.
Además, advierte a doña María Eugenia Carballedo Berlanga, Consejera de Presidencia de la Comunidad de Madrid, que ‘no se deje utilizar por personas que por falta de sensibilidad y de respeto, organizaron un acto el mismo día y a la misma hora en la Escuela de la Plaza de las Ventas, para contrarrestar el sentido y sincero homenaje que le ofrecimos los cabales en la plaza que también lleva su nombre de la Venta del Batán. Los chavales no deben sufrir nuestras miserias, odios, rencillas, cobardías, traiciones, envidias, etc…’.
Este es el comunicado íntegro de Joselito:
He tomado la firme y meditada decisión de dar un paso al lado de la Escuela Taurina de la Venta del Batán, para que los alumnos de la Escuela José Cubero “Yiyo” ocupen nuevamente las instalaciones de donde no deberían haber salido, y así no estén entrenando en pasillos y corrales. Hicimos todos los esfuerzos posibles para que no salieran, hasta el punto de conocer humillaciones toreras y personales de tres excompañeros por sus traiciones, tres políticos por su avaricia y egoísmo, y tres componentes de la empresa Plaza 1 de Las Ventas, por haber sido chantajeados o chantajear, inacción, omisión y falta de respeto a la profesión.
En los últimos tres años hemos tenido negociaciones con Madrid Destino, Centro de Asuntos Taurinos y Plaza 1, para que volvieran los alumnos a entrenar en el Batán.
Nos tildan de ocupas el Sr. Cueto y algunos pseudotaurinos profesionales, y sólo queremos que la Venta del Batán, vuelva a ser.
‘No dejo la Escuela por cansancio, ni por frustración, ni me escondo en glorias pasadas, sino creyendo más que nunca en la necesidad de un cambio’.
No dejo la Escuela por cansancio, ni por frustración, ni me escondo en glorias pasadas, sino creyendo más que nunca en la necesidad de un cambio y en la puesta en marcha de las propuestas innovadoras del Centro Superior de Maestría en Tauromaquias, con el que me identifico y seguiré colaborando.
La corrida actual, cuando se produce en plenitud, es grandiosa.
No hay mayor ceguera que el que no quiere ver y es evidente que debemos adaptarnos a las nuevas evoluciones, que mejorarán la lidia en su conjunto.
Las novilladas desaparecen, los novilleros tienen que debutar con picadores en plazas de primera, los ganaderos están cansados y arruinados ¿qué hacemos sin los elementos primarios que son la esencia imprescindible de la corrida?
Gracias a todos los entusiastas, intelectuales, científicos, colaboradores y políticos, que tanto han enriquecido mis conocimientos en la materia. Entre todos hemos hecho posible que la Venta del Batán no sea hoy un centro animalista, en el que lo querían convertir la Sra. Carmena y compañía.
Señor don Fernando Benzo, gracias por la gestión de las ambulancias el pasado fin de semana, y sobre todo a usted y a todos sus colaboradores por el gran Plan Pentauro. Sr. Don Luis Lafuente, gracias a usted y a sus acompañantes por la visita de inspección del pasado mes de octubre, para el futuro proyecto de la Venta del Batán.
Los chavales no deben sufrir nuestras miserias, odios, rencillas, cobardías, traiciones, envidias, etc. Debemos transmitirles actitudes y comportamientos de grandeza torera y humana, de romanticismo, de sinceridad, de compromiso, de ética y a veces rearme moral.
El Centro Superior de Maestría en Tauromaquias no necesitaría más apoyo económico que el que actualmente tienen previsto asignar las instituciones, empresa y ganaderos. Este centro servirá para introducir nuevos conceptos de útiles, formas y modos de formación y promoción profesional de novilleros.
Excelentísima señora doña María Eugenia Carballedo Berlanga, Consejera de Presidencia de la Comunidad de Madrid, no se deje utilizar por personas que por falta de sensibilidad y de respeto que merece la figura del gran torero, insigne y desaparecido alma de la Escuela en sus orígenes (José Cubero “Yiyo”), organizaron un acto el mismo día y a la misma hora en la Escuela de la Plaza de las Ventas, para contrarrestar el sentido y sincero homenaje que le ofrecimos los cabales en la plaza que también lleva su nombre de la Venta del Batán. En cuyo acto, por mis sentimientos encontrados de cuando yo inicié y de los que inician ahora, y por las citadas ausencias, me sentí profundamente abatido y decepcionado.
Los chavales no deben sufrir nuestras miserias, odios, rencillas, cobardías, traiciones, envidias, etc. Debemos transmitirles actitudes y comportamientos de grandeza torera y humana, de romanticismo, de sinceridad, de compromiso, de ética y a veces rearme moral.
Todos hemos de cambiar comportamientos y de trabajar conjuntamente para no alejarnos de los aficionados.
Me voy sin que nadie me lo haya pedido. Vine al proyecto con mucha ilusión y me separo con tristeza.
Sinceramente.
Talavera de La Reina, a 19 de diciembre de 2019.
José Miguel Arroyo “Joselito”